Escena Guffesca

El otro día, se me habia olvidado comentarles que fui testigo de una escena digna de describirse por maese Guffo, pero en ausencia de él, lo hago yo.

Estaba yo en el centro de esta capital potosina, y digo en el centro ya que estaba en plena plaza de armas. Bueno esperaba a una amiga frente a catedral que era el sitio donde habíamos quedado.

En esos minutos, vino acercándose un niño jalando a un puestecín de globos de todas formas y colores, como se estila venden en el centro; y un poco más atrás venía la hermanita del niño.

Estos niños como son también como los que cuidan el parque Tangamanga, (no me pregunten el significado y no quiero dar el googlazo) son niños de familias pobres que no creo asistan a alguna institución e.ducativa y que pienso por todo lo que tienen que hacer de chavitos, su situación debe ser por lo demás dura.

Bueno pues esta niña venía cargando a un perrito de esos callejeros muy chiquito, de hecho cuando lo bajó apenas si podía sostenerse en sus patitas. También venía cargando un envase pequeño de Quik o como se escriba de chocolate. La escena enternecedora fue que anduvo consiguiendo un platito o algo de plástico con el bolero de enfrente (muy bueno por cierto para la boleada) para en vez de tomarse ella el chocolate, invitarle a su pequeña mascota.

Entonces imagínense la escena, la niña asi con su carita chorreada agarrando al perrito que se veía que traía un hambre canija ya que devoraba la bebida endulzante. Y ella feliz mirándolo y jugando con él.

Es una lástima q no carge con cámara ya que estuvo buena la escena.