Yo no quiero ser un blogstar.

Sencillamente yo no quiero ser un blogstar, no no quiero. Como os dije antes, estos escritos son como tipo terapia para este ofensivo e inhumano para liberar el estrés, reírme de mis idioteces y hacer mofa de quien se deje.

Y es que cómo competir con la poética de la Conflictiva (que debo reconocer, no entiendo), la cual pues nunca ha sido mi fuerte eso de la poesía y aunque alguien más escribió que todos llevamos un poeta adentro, como que se les olvidó incluirlo en el paquete cuando me mandaron a este mundo traidor. (Y rellenaron el espacio con estupidez, orgullo y un gansito pa’ llevar)

Como se puede escribir con un verdadero semidios que responde a su nombre, cuya calidad en la narrativa es inobjetable?

Cómo competir con el humor del tapatío, sus ocurrencias y peripecias?

O cómo expresar de manera totalmente cachonda la sexy explícita sexualidad rayando en lo porno de Nana X?

Vaya, o cómo competir con la naturalidad, sencillez, belleza del blog de Xquenda? (Y con la autora también).

Snif! O como ser como mis paisas S.S Phineas y Pinwall Wizzard y su genial blog?

No señores, mi estilo es propio. Es malo pero es mi estilo.

No pretendo tampoco estar en los links de tan gigantes personalidades del mundo cibernético. Y no tanto porque no se pueda, sino que a veces sus letras y opiniones son tan aplastantes que dejan poco margen de maniobra. (Y a veces están tan jaladas hay que reconocer). Además no es mi objetivo el colgarme de la fama de ellos, reconozco son buenos pero creo que me sigo cayendo más bien yo mismo.

Sin embargo, como dije en el otro post, me siento obligado hacia las pocas personas que leen mi blog, ya que se toman el tiempo para leer estas cosas, se pueden distraer un rato de sus alocadas y aceleradas vidas para notar que, en este mundo raro, existe un Valek aún más raro.

Que a veces es tan ofensivo que tan ganas de darle unos madrazos, a veces tan cachondo man que hace que las mujeres tapen sus partes (así como quitando ropa con la mirada), que a veces anda de un simple e ingenioso humor que hace que te duela el estómago con sus ocurrencias, o que anda tan intoxicado que queda ciego y que a menudo habla de filosofías y da grandes máximas a los presentes.. cual bien culturoso o como me autonombro, cual buen pseudointelectual.

O que a veces se quita sus armaduras, descansa y se muestra frágil tal y como aparece en una foto cuando Iceman tenía como 5 años vestido de payasito. (Esa foto muestra en gran escencia lo que es Iceman, está la mirada hacia un mundo que no comprende), y se pone medio romanticón y querendón. Y balbucea canciones de amor en estado de trance hipnótico producido por las endorfinas del cerebro... y cambia su voz por una susurrante (y no hablando escatológicamente)

No señores, no los abandonaré, me he hecho un compromiso con ustedes y estaré por aquí dizque posteando.