Si me dijeran pide un deseo..Parte 1

Bueno, para ya no crear expectativa en cuanto al deseo cumplido, déjenme les relato una parte.

Últimamente, he agarrado la costumbre de extender mi sleeping bag en el suelo y quedarme retozando un rato sobre él. Ahí reflexiono un rato sobre la vida y la muerte, la religión, los desencuentros, etc. etc.

Pues un día andaba de místico y pagano y me puse a charlar con Dios (eso de charlar es un decir ya que así que digas uy! como lo escuché pues no)

Y recordé que tenía una oración de petición según eso que muy buena para cumplir deseos. Entonces que me la chuto pero como que sabe, empecé a hablar no exactamente de la oración en sí, si que hablé como con mucha fe que me estuviera en verdad escuchando alguien y pedí un deseo.

Desde hace mucho tiempo, tenía en la mente muy grabada la imagen que por cierto ya subí al blog, del niño de mirada triste que miraba al infinito. Y crecí con esa imagen realmente congelada en el fondo del corazón de ese vejo de tristeza en la mirada.

Algo debió de ocurrirme en esos años de niñez inicial para tener ese rostro, sin embargo no recuerdo qué fue exactamente, no sé si fue el fallido accidente o algo más. El caso es que es antiguo y pues como tampoco tengo lana para pagar una regresión hipnótica al loquero, pues ahí se quedó en el olvido.

Y el Iceman (el personaje), también hace varios años dijo yo creo lo más sensato y coherente que ha dicho desde su creación: “Mis tristezas son tan añejas que a veces se pierde el sentido de las mismas..”

Pero el deseo no fue el saber el porqué de esa tristeza añeja, dejen me desocupo para postearlo luego.